Vicente del Bosque sigue empeñado en descolar a sus delanteros. Si primero era Villa el desterrado a la banda izquierda, hoy también F...
Vicente del Bosque sigue empeñado en descolar a sus delanteros. Si primero era Villa el desterrado a la banda izquierda, hoy también Fernando Torres se dejó caer por la derecha. El resultado: balones al área sin nadie para rematarlos...
Afortunadamente, Queiroz no ha conseguido manejar el vestuario portugués y la sintonía entre Cristiano Ronaldo y el resto de sus compañeros no parece estar atravesando un buen momento, con lo cual, el delantero madridista apenas recibió balones por banda con los que pudiera desbordar.
Como era de esperar, se llegó al descanso con el empate a cero. La segunda mitad comenzó de la misma manera hasta que, por fin, Vicente del Bosque movió ficha. Aparentemente, el cambio fue delantero por delantero, Torres cedía su puesto a Llorente, pero, al mismo tiempo, se produjeron pequeños cambios que dieron grandes frutos.
David Villa se aproximó más al área, dejando la banda para Capdevilla, así se sacrificaba un centrocampista que cubriría el lateral dejado por el catalán. En resumidas cuentas, volvimos a jugar con dos delanteros (ya que Llorente sí se colocó en su puesto natural), con dos extremos (aunque no se recurriera ni a Navas ni a Silva) y, con más espacios en el centro del campo, el juego de España volvió a ser el mismo que el de la Eurocopa y llegó el gol que nos dio el pase a cuartos de final.
Tras una combinación entre Xavi, Iniesta y Alonso (con más espacios el talento de estos genios es cuando realmente se nota) el balón llega a Villa, estando éste en su posición lógica (dentro del área, al igual que Llorente) y el asturiano remata a puerta, Eduardo rechaza y ya en el segundo disparo Villa no perdona y consigue el gol del partido.
Jugando con este esquema, podemos llegar a ser campeones del mundo. Todo dependerá si Del Bosque se olvida de su predecesor en el cargo y aprovecha lo que tiene al máximo. Con un Villa en estado de gracia es incompresible que no juegue más cerca del área, de hecho, si lo hiciera, seguramente España tendría muchos más goles a favor. Si nuestro seleccionador quiere seguir con este experimento de transformar a un delantero en extremo, mejor que el elegido sea Fernando Torres, ya que, dado su falta de ritmo, podría aportar mucho más al equipo por banda yéndose en velocidad y enviando centros al guaje. Así, Iniesta también recuperaría la zona izquierda para explotar su mejor juego para crear más opciones que pueda aprovechar el goleador Villa.
Visto lo visto, parece que Vicente del Bosque sabe dónde radica el problema. Otra cosa es si su orgullo será superior a la ilusión de todo un país...
España: Casillas; Sergio Ramos, Puyol, Piqué, Capdevila; Busquets, Xabi Alonso (Marchena, m.93+), Xavi, Iniesta, Villa (Pedro, m.88); y Fernando Torres (Llorente, m.58).
Portugal: Eduardo; Ricardo Costa, Carvalho, Bruno Alves, Fabio Coentrao; Pepe (Pedro Mendes, m.72), Tiago, Raúl Meireles; Simao (Liedson, m.72), Cristiano Ronaldo y Hugo Almeida (Danny, m.58).
Goles: 1-0, m.63: Villa.
Árbitro: Héctor Baldassi (ARG). Expulsó por roja directa a Ricardo Costa en el minuto 89 por un codazo a Capdevila. Amonestó a Xabi Alonso (74) por España, y a Tiago (80) por Portugal.
Incidencias: encuentro de octavos de final del Mundial de Sudáfrica 2010, disputado en el Green Point Stadium de Ciudad del Cabo, ante la presencia de 62.955 espectadores.
Portugal: Eduardo; Ricardo Costa, Carvalho, Bruno Alves, Fabio Coentrao; Pepe (Pedro Mendes, m.72), Tiago, Raúl Meireles; Simao (Liedson, m.72), Cristiano Ronaldo y Hugo Almeida (Danny, m.58).
Goles: 1-0, m.63: Villa.
Árbitro: Héctor Baldassi (ARG). Expulsó por roja directa a Ricardo Costa en el minuto 89 por un codazo a Capdevila. Amonestó a Xabi Alonso (74) por España, y a Tiago (80) por Portugal.
Incidencias: encuentro de octavos de final del Mundial de Sudáfrica 2010, disputado en el Green Point Stadium de Ciudad del Cabo, ante la presencia de 62.955 espectadores.
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