El 22 de Marzo de 2.013 Sergio Ramos cumplía 100 partidos con la Selección Española a la edad de 27 años. Pocos jugadores pueden presum...
El 22 de Marzo de 2.013 Sergio Ramos cumplía 100 partidos con la Selección Española a la edad de 27 años. Pocos jugadores pueden presumir de llevar tantos encuentros internacionales con tan pocos años. Por ello, el Diario Marca le dedicó una amplia entrevista
- ¿Cuántas veces se cambió para jugar cuando era un niño soñando con ser Maldini?
- ¡Muchas! Es verdad que Maldini ha sido un referente en mi carrera, como Hierro. Y sobre todo, Tiburón Prieto, Pablo Alfaro y Javi Navarro, que eran mis ídolos en el Sevilla.
- La semana que viene cumple usted 27 años. ¿Sabe cuántos partidos llevaba entonces Maldini con Italia?
- Ni idea.
- Sumaba 64 y usted llega hoy a 100 a esa edad.
- Es otro dato más para estar orgulloso, una alegría más. Puyol cumplió en Doha los 100 partidos con 34 años. Para mí es una gran alegría llegar a esta cifra por el gran esfuerzo que me ha costado conseguirlo con sólo 26 años. Soy el más joven en la historia de España en lograrlo y ahora lo que quiero es seguir sumando partidos con la selección.
- ¿Sabe que supera a Podolski, el delantero de Alemania, como el europeo más joven en llegar a los 100 partidos con su selección?
- No lo sabía. Es un orgullo formar parte de la historia del fútbol y ojalá pueda seguir superando marcas y, sobre todo, ganando cosas con nuestra selección.
- Son 100 partidos, 100 sensaciones, centenares de historias. ¿Qué resumen haría usted de este largo viaje con La Roja?
- El de un sueño cumplido desde el día de mi debut contra China en Salamanca. Y luego, mantenerse, que es lo más complicado. Me quedo con los tres títulos, porque los éxitos son los que ponen la guinda. Con dos Eurocopas y un Mundial a mi edad creo que es una marca que será difícil superar. Pero ojalá esta selección pueda seguir ganando cosas.
- Hace más de medio siglo, desde 1962, cuando lo hizo Brasil, que nadie gana dos Mundiales seguidos. ¿Es todo un reto?
- Así es. Es un reto y son barreras que a los futbolistas nos gusta romper. Ojalá podamos seguir alcanzado cosas que parecían imposibles, porque ya hemos demostrado que somos capaces de hacer esas cosas.
- ¿Qué es para Sergio Ramos la camiseta de España?
- Fuerza, compromiso, valores… Todo.
- ¿Se acuerda de la primera que tuvo?
- Sí, una que me compró mi padre una vez que vino la selección a jugar a Sevilla. Esa no la tengo. De pequeño estaba todo el día con camisetas de fútbol y acababan reventadas.
- ¿Se acuerda de un partido en Sintra con la sub 17 con Adán, Pallardó…?
- ¡Sí! Fue mi primer partido con la selección española. Echas la mirada a atrás y te da hasta pena ver lo rápido que pasa tiempo. Recuerdas esas cosas, esos partidos y te emocionas. Hay que disfrutar cada momento como se merece porque todo avanza muy rápido por muy joven que seas.
- ¿Guarda cosas de aquellos tiempos?
- Sí, tengo dos pequeños museos, uno en la casa de Sevilla y otro en Madrid. En la de Sevilla tengo recuerdos de mi paso por las categorías inferiores: fotos con Silva, Iniesta… Pasan miles de jugadores, unos llegan y otros no pero los recuerdos de uno son para siempre.
- ¿Se acuerda del 18 de marzo de 2005?
- Claro, fue la primera vez que se me convocó para la selección absoluta. Como si fuera hoy. Había llegado del entrenamiento con el Sevilla y mi madre estaba haciendo la comida. Llegaron mi hermano y mi padre, que fueron los primeros en felicitarme. Se estaba hablando de que podía ir, pero hasta que no oyes tu nombre en la lista no te lo crees. Me acuerdo del primer reportaje, en casa con la camiseta de España y el número 2, que era el que llevaba en la sub 21 porque jugaba de lateral. Fue un sueño hecho realidad.
- Llega, se encuentra con Luis Aragonés y…
- Luis siempre te marca con las cosas que te dice. El futbolista sabe que lo de Sabio es más que un sobrenombre. Es lo que es. Lo sabe todo de este deporte, sus códigos. Ha sido un privilegio tenerlo como entrenador. Lo primero que me dijo fue: «Niño, sal y hazlo como tú sabes, que yo tengo anchas las espaldas y si la cosa sale mal las críticas serán para mí.» Eso se me quedó marcado. Que entrenadores como Luis Aragonés o Joaquín Caparrós se la jueguen con gente sin experiencia dice mucho.
- ¿Y Del Bosque?
- Al margen de una persona ejemplar y un ejemplo para la sociedad y para España, es un magnífico entrenador. Otro sabio del fútbol.
- Ahora todo es de color de rosa. ¿Imaginó que iba a poder vivir esto?
- Mentiría si dijera que no era un sueño, pero la historia estaba ahí. España nunca había ganado un Mundial y la Eurocopa no se ganaba desde 1964. Era un reto, una motivación. Ahora hay que disfrutar a esta selección. Da pena pensar que España ha tenido siempre grandes futbolistas y que por motivos razonables y otros no tanto, como el codazo de Tassotti, no se lograba ganar. España se merecía una selección campeona como esta y tras mucho tiempo se ha conseguido. Pero que nadie olvide lo que ha costado esto.
- ¿Se ha preguntado alguna vez cómo habrá disfrutado con la selección aquella gente que os recibió tan mal tras perder en Suecia en 2007?
- Pues sí, y me alegro de que disfrutaran el 11 de julio. A veces hay excesos que van más allá de las críticas. Aquello en Murcia fue duro: la pitada, los insultos… Lo mejor de todo es que en medio de las crisis las victorias de la selección española hayan servido para unir a un país.
- De esos 99 partidos que lleva, ¿qué día borraría?
- El de la eliminación contra Francia en el Mundial de Alemania de 2006. Era mi primer Mundial y mi primer gran partido. Por suerte hemos podido devolver lo que aquel día no alcanzamos.
- ¿Le ha hecho llorar alguna vez la selección?
- De emoción, sí, que es más bonito. A mí padre le he visto llorar pocas veces y una fue viendo a su hijo levantar la Copa del Mundo. Es una de las cosas que más me han marcado.
- ¿Suyo fue el gol con el que arrancó el famoso ‘tiqui-taca’?
- Sí, en Aarhus, cuando ganamos a Dinamarca. Se lo dediqué a mi sobrina Daniela, que aún no había nacido. Allí se gestó una filosofía de juego, una forma de entender el fútbol. De ese gol me acordaré siempre. Ese día cambiaron muchas cosas, nos dimos cuenta de que juntos podíamos cumplir objetivos. Veníamos de críticas muy duras, nos estaban esperando y eso hizo que nos uniéramos más que nunca.
- Ahora, seis años después, se mira la estrella que lleva en la camiseta y ¿qué piensa?
- En lo que cuesta conseguirla. Este país se merece, sin duda, la estrella.
- ¿No se le escapa una sonrisa cada vez que se cruza con Iniesta en la selección?
- Siempre que le veo me acuerdo del gol. Con Andrés siempre he mantenido una relación diferente por su forma de ser. Cae bien a todo el mundo. Era el más indicado para marcar aquel tanto en la final. Es inevitable mirarle y no acordarse del gol.
- Ese fue un momento único, como el penalti que tiró ante Portugal.
- No es que fuera un momento más, pero lo tenía superclaro desde que fallé el penalti en la tanda ante el Bayern de Múnich. Era una espina personal, no por las cosas que se dijeron. Uno sabe quién es y la repercusión de todo lo que hace. Con eso tengo que vivir. Si algo me ha hecho ser lo que soy es mi personalidad y mi forma de ser.
- ¿No tuvo miedo a fallar ese penalti por esa elección tan arriesgada?
- No, eso va con mi forma de ser. Se lo debía a mi madre y a mi hermana por lo que habían sufrido después de lo del Bayern. Seguro que muchos de los que se burlaron y criticaron disfrutaron mucho con el de Portugal.
- ¿Siente que hacen felices a millones de personas?
- El recuerdo de llegar a España y ver a la gente en la calle, todo lleno de banderas, que hubiera que lanzar mensajes para que la gente dejara de venir a Madrid, es algo grandioso y nosotros hemos tenido la suerte de vivirlo. Que en momentos tan duros la gente pueda sonreír gracias a su selección no tiene precio.
- Pues para seguir sonriendo hay que estar en el Mundial de Brasil.
- Creemos en nosotros y dependemos de nosotros. No vamos a menospreciar a Finlandia ni a nadie. Nunca lo hemos hecho por mucho que el rival tenga menos nombre que otros rivales.
- Pero el partido de París es de los grandes.
- Sí, pero antes está el de Finlandia y no hay que desviar ni un centímetro la atención de ese partido. Ya habrá tiempo de pensar en el del martes en Francia.
- Si alguien duda de que España vaya a estar en el Mundial, ¿qué le dice?
- Que espere a ver estos dos partidos, que esta selección ha hecho méritos para que no se dude de ella y que vamos a darlo todo por lograrlo.
- ¿Llegó a temer que lo ocurrido en los partidos Real Madrid-Barça rompiera la selección?
- Hasta el punto de temer creo que no llegué. Uno, como profesional, tiene que ser lo suficientemente inteligente como para valorar el grupo de jugadores que tenemos, el ambiente que logramos crear. Pasaron cosas, diferencias. Fue un momento muy complicado porque nos jugamos todo entre los dos equipos en muy poco tiempo. Demasiada tensión que se notó luego en la selección.
- ¿Cómo se consiguió salir de aquello?
- Son cosas internas, pero hubo una reunión muy clara entre los jugadores de los dos equipos y el seleccionador para dejar claro que esas cosas no ayudan y que si queríamos ser campeones había que zanjar esas diferencias. La gente se entiende hablando.
- ¿Acabará yéndose de cañas con Piqué?
- Hace poco dije que no me iba de cañas con Piqué, pero mantenemos una relación superprofesional. No tenemos ninguna diferencia y si un día hay que irse de cañas con Piqué, perfecto, no habrá ningún problema.
- ¿Cómo es su relación con los jugadores del Barça?
- Yo siempre he mantenido una buena relación con los jugadores de otros equipos, no sólo con los que hay aquí del Barcelona. Yo soy madridista puro y defiendo hasta la muerte mis colores y mi escudo, pero eso no quiere decir que me tenga que llevar mal con otros compañeros.
- Acabamos con algo del Madrid. ¿Le falta ganar la Champions?
- Es algo con lo que sueño. Ojalá sea pronto el momento de levantarla. Pero es mejor no obsesionarse con un objetivo porque si eso pasa las cosas acaban por no salir bien. La ambición por ganarla es inmensa.
- Sin rodeos: ¿Cómo es una relación con Mourinho?
- Si la gente conociera realmente cómo es mi relación con Mourinho se sorprendería. Es bastante buena por mucho que nos quieran enfrentar constantemente. Es algo que no entiendo porque no hay nada. Los dos luchamos por el mismo objetivo. Nadie debe tener ninguna duda de que tiene todo mi respeto. Es el entrenador y es el que manda.
- ¿El futuro de Sergio Ramos en el Madrid no depende de que siga o no Mourinho en el banquillo la próxima temporada?
- Para nada. En absoluto. El entrenador idóneo para el Madrid esta temporada y durante mucho tiempo se llama José Mourinho.
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